Soñamos con un nuevo día, cuando el nuevo día no llega. Soñamos con una batalla, cuando ya estamos luchando.
~El club de los poetas muertos.

domingo, 20 de mayo de 2012

Tan sólo otra más.

¿Sabéis esta sensación que tienes, cuando te empieza a gustar alguien y tú quieres precisamente lo contrario? Pero es tan difícil no caer...

Todo empieza cuando le conoces. Al principio tampoco te fijas mucho en él, te parece como cualquier otro. Pero te empieza a hablar, muestra interés en ti, parece fascinado con cómo eres y no deja de repetirte lo increíble que le pareces. Ahí es cuando empiezas a fallar. Tu plan de 'chica dura' con todos el mundo, de no dejar que nadie entre en tu caparazón, no funciona con él. Es capaz de con sólo dos palabras, o con una simple sonrisa, una mirada...hacerte sentir más expuesta que nunca.

Es entonces cuando tú dejas de mostrarte tan fría, intentas ser lo mejor para él, intentas asombrarle cada minuto, hasta que él parece cansarse de ti, y todo se enfría. Llega un punto en el que si tú no saludas, él tampoco lo hace. Que si tú no sacas tema, el no se va a esforzar por mantener una conversación contigo. Te das cuenta de que se ha cansado de ti, que ahora tiene otras distracciones. ¿Mejores? Tal vez, pero a ti lo único que te importa es que en tu afán de no caer, has caído. Y chocando con más fuerza que nunca, dejando que tu corazón tan maltratado llegue al punto de desquebrajarse.

Haces todo lo posible por no perderle. Te niegas a perderle, porque aunque fuera por poco tiempo, te había hecho feliz. Y no te importa que tu corazón termine hecho papilla, no. No te importa, con tal de saber que sigues existiendo para él, aunque sea como la pesada chica que le acosa. 

1 comentario :

  1. ¡Me encantó la entrada, porque es super realista y es exáctamente eso lo que ocurre! Un besito desde http://nowherebutupwithyou.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar